Recordar los juguetes con los que jugábamos cuando éramos niños produce una gran nostalgia que nos retrotrae a aquellos tiempos. Pero si además ves las imagenes de aquellos juguetes, una detrás de otra, a mí me pone la piel de gallina y se me humedecen los ojos...
A ver quién es capaz de ver el siguiente video con juguetes de los 60 (quizás también de los 50), de los 70 y alguno de los 80, sin emitir un suspiro. Confieso que yo soy incapaz. El video está montado en Argentina, pero al menos un 50% de los juguetes coinciden con los que teníamos los niños de España, y de ellos muchos se verían por Benínar. Si no las mismas marcas, equivalentes.
Los juguetes que yo recuerde de niño, son los mencionados por los Benineros en otros artículos, eran simples, funcionales.
ResponderEliminarMas simple que un columpio realizado con una cuerda, un cojín y atado a un palo de la techumbre de la cámara de casa, podía pasarme toda una tarde jugando, horas y horas, con una niña de morenos bucles y alegre sonrisa.
O una simple bola casera con esparadrapo liado, muy dura, que servía de pelota para jugar al frontón en la pared del reducto de la iglesia.
O un simple balón, servía para organizar pequeños partidos de fútbol.
Un simple aro de bicicleta guiado con un alambre rodado por la carretera o por las calles del pueblo, y la chiquillería corriendo tras de ellos.
Otros muchos muchachos tenían afición por criar palomas y otros animales.
ninguno de los jugetes que salen en el video llegarón a Beninar. Los jugetes de ciudad empezarón a llegar con los hijos de los que se fuerón a Cataluña, los que viviamos en el pueblo le hechabamos imaginación.
ResponderEliminarEsos juguetes manuales que se hacían los niños son difíciles de localizar en youtube para verlos, aunque lo voy a intentar, a ver si doy con alguno, al igual que por suerte di con el molinillo en el agua del rio.
ResponderEliminarLos juguetes de "ciudad" como les llamas y que salen en el video los trajeron proprimera vez los hijos de los que se fueron a Cataluña ¿Principios de los 60? ¿O un poco antes o un poco después?
Yo personalmente nací en 1960 y de siempre he tenido juguetes de los que se compran (también hacíamos los nuestros, como tirachinas, patinetas, columpios, etcétera), pero me imagino que en los 50 ya se dispondria en Benínar de coches de lata y muñecas y caballos de cartón. En los 40 la cosa sería bien distinta.
Un video muy "refrescante" e imaginativo, que se agradece doblemente un lunes por la mañana.
ResponderEliminarGracias Rafa.
Juan Gutiérrez.
Rafa, por supuesto que en los cincuenta teníamos aquellos juguetes de lata y cartón que conté en mi escrito.También llegaron los de plástico antes de los sesenta.
ResponderEliminarDe los que has puesto en el video, los soldados y los indios, (también ciclistas de plástico, creo que nos los daban al comprar chocolate).
Después de esa fecha y con más de once años, jugaba con "mecano" y otros más sofísticados, fuera de Benínar. En el pueblo, ya no se con que se jugaba.
Juan Gutiérrez.
Con papel de estraza o periódicos usados y superpuestos en varias capas para dar firmeza, hilo bramante de cáñamo para la brida.
ResponderEliminarPor pegamento se usaba la sabia de los almendros medio secos, diluida en agua, y aplicada sobre el papel, con una brocha de pintar.
La estructura un rombo realizado con los jopos de las cañaberas nacidas en la ramblilla, flexibles y huecos. tados en cruz por el centro.
Por cola una guita atada con trapos para dar peso.
Así nacía, entre la chiquillería, mas de una cometa, con simpleza, e imaginación, volada en la hera de Adoración, encima de los Majalones.
Ni en las fiestas del pueblo, se daban juguetes de ciudad, todo era muy natural, imaginativo y simple.
Debía de correr el año 1946 cuando estando en Benínar "los Reyes" me pusieron una caja de acuarelas, lo que me llenó de ilusión, pero más me hizo una navaja pequeñita y con la punta redondeada que al día siguiente ya había perdido. Seguro que estos Reyes vinieron de la capital.
ResponderEliminarEn el tema juguetes lo ideal era hacerlos uno mismo, se disfrutaba al hacerlos y era el colmo cuando le hacías el chequeo de prueba.
Haces un recorrido muy interesante, sobre maneras de diversión que teníamos los niños en Benínar.
ResponderEliminarLos mecedores en las cámaras o azoteas, las cometas, pegadas con goma de almendro..
Por la fecha que pones, pienso que eres un poco mayor que yo.
Cuenta todo lo que recuerdes, sobre la fabricación de juguetes caseros. Yo los recuerdo, pero casi todos, los hacían los mayores.
Los molinillos de juncos de Benínar eran mucho mas complicados de hacer del que puso Rafa en el vídeo...
Cuenta todo lo que recuerdes (la cometa, la has explicado muy bién).
Hay mucha gente que te lo agradecerá.
Juan Gutiérrez.
Cortar un raigal de almez o de granado, maderas ambas flexibles, ponerles una cuerda y hacer un arco.
ResponderEliminarLas flechas de los pequeños eran realizadas con los jopos de las cañaberas de la ramblilla, acto menos peligroso.
Los mayores usaban barillas de los paraguas afilada la punta, con el roce, contra el suelo de la carretera, o con un canto rodado del río.
Acto seguido dirigirse a cualquier estanque, que en el pueblo había muchos, y rana que asomara la cabeza, acto seguido era ensaltada con gran maestría, acierto y distancia. El juego en sí no era cazar la rana, sino la competición entre los crios, de poder ensartarla, cosa ardua y difícil.
El juego de la penca y la navaja.
La fabricación de hondas de esparto, y el uso de la misma con buen acierto, en el río.
En Beninar el Pastor era un gran artista de este arcaico instrumento.
La fabricación de cepos con alambre de emparrar, y el hacer los muelles, con el alambre de acero de los neumáticos de camión o de bicicleta, enroscándolos en un sentido y en otro inverso sobre un hierro redondo ensartado por una tabla. Se lograba la forma del muelle del cepo, artesanal, pero en serie.
En contra de los hábitos culturales y sociales actuales, los niños de Beninar cazábamos pájaros de todo tipo, para pelar, freir y comer por diversión, con dichos cepos, desde tiempos remotos. Cosa que en la actualidad está prohibido por ley.
Coger colorines de los nidos, siendo enjaulados muy jóvenes, en unas jaulas muy pequeñas, acto que se llamaba encenachar, corgandose la jaula cerca del nido, los padres procedían a alimentarlos. Poco a poco el niño hiba alejando la jaula hasta colgarla en la fachada de su casa, no parando los padres en todo el proceso de cebar a los hijos.
El contacto y conocimiento de la naturaleza por los niños del pueblo era tremendo, y ese conocimiento se pasaba de generación en generación de niños.
Otra vez me dirijo a tí, amigo anónimo.
ResponderEliminarSe nota que tienes unos cuantos años mas que yo (lo digo porque citas el 46 y yo nací a final del 49)porque teníais mas imaginación que los que veníamos después.
Los cepos,los comprábamos.
Los arcos, con las tiras de las tinas de arenques.
Ah!! eso si, la honda (como buén hijo de pastor- aunque muy lejos-) todavía me acuerdo como se hace y tiraría alguna piedra también.
Has dado pistas(46, acuarelas 8,10 años...) Tengo dos nombres....
Pero lo importante no es saber quién eres.Lo importante es que recuerdas cosas de Benínar y con cariño, porque se nota.
Un saludo, Juan Gutiérrez.