A modo de Ripios a un Viaje

Con las luces de un farol,
salimos de la noble Abdera,
a un destino con solera.
Y en Málaga nos guiñó el sol.

Nos levantamos temprano,
para ver Jerez con donosura
al toro con su bravura,
y al caballo cartujano.

Yo levanto mi sombrero,
ante el caballo andaluz.
El Grande le dé salud,
al caballo y caballero.

Ágiles son y briosos,
con una gran hidalguía.
Son jóvenes y hermosos.
Dignos de monarquía.

Todos se parecen,
a Espartero y su caballo,
son enormes..¡Oh carallo!
y parece que aun crecen.

Lo curioso en lo de Byas,
son los pícaros ratones,
borrachos y cabrones,
pues casi nadie los veía.

Como unos privilegiados,
comen queso y beben vino.
Resuelto está su destino,
y a fe que son admirados.

Por la maña arte campero.
Los mozos y mayorales,
son sabios y muy cabales,
preparando al toro "pal" toreo.

Estuvimos en el tentadero
de la dehesa de Cubillo.
Más "alguien" cual maletilla pillo,
se quedó en el burladero.

El ágape fue soberano.
Garbanzos de Vitigudino,
regados de gran vino
y bien cocidos al butano.

Esta peña taurina,
tiene socios singulares
del arte de cúchares,
todos saben y adivinan.

Hay los especiales.
Unos son de bandera
¡viva la fiesta campera!
el toro, ganadero y mayorales.

Es la gloria de Almeria,
Juan Gines el Abderitano.
es presidente y humano,
y lleno de simpatía.

Hombres que sois del Ejido
hechos de toro y de raza,
de vuestra afición es sabido,
a ver si hacéis una plaza,
con el siete en el tendido.

Que viva el presidente,
el secretario y la junta entera.
Pues señores...soy consciente
que resultó la campera,
y todo fue sobresaliente.

Estos ripios de solaz
dichos he consentimiento
verdades escribe Sarmiento,
pues en él no hay falsedad.

Disputas son de los bares,
sobre prohibir el toreo,
yo me quito el sombrero
ante el arte de Cúchares.

Contóme una compañera
lo bien que lo pasó,
pues nunca se imaginó,
una fiesta tan campera.

La "espique" de modo sencillo
lo explico con categoría.
Grande es su sabiduría
sobre el toro de Cuvillo.

Pedro Sarmiento Posada