Páginas

domingo, 14 de octubre de 2012

EN OTOÑO, LAS SETAS (bolets)

Hoy hemos tenido suerte!
Con el título benineros en Cataluña, que encabezó la Fiesta del Arroz, (publicado el 21-3-2011) seguiremos recopilando para compartir con todos los paisanos, las costumbres y festejos de esta zona en donde echamos raíces muchos benineros desde hace tantos años… 

Aquí, como en muchas partes de España, la costumbre de ir a buscar setas (caçar bolets) está muy arraigada; por eso, los “aficionados” llevamos en cuenta las imprescindibles lluvias caídas desde mediados de Agosto, pues los bosques tienen que recuperar la humedad perdida durante los calurosos meses de verano.

Cuando las lluvias caen con regularidad y las temperaturas refrescan, (el suelo tiene que estar a unos ocho grados) comienzan a salir los primeros ejemplares en la alta montaña. 
En la alta montaña (Pirineo por Andorra, Coll de Nargó, La Gabarra, Puigcerdá, La Molina,) es frecuente encontrar los primeros rovellones (níscalos) o los deliciosos ceps (boletus) en pleno Agosto, si en el mes de julio han caído puntuales las clásicas tormentas vespertinas. 
Pero es finales de septiembre, la fecha ideal para empezar a recorrer los bosques del pre-Pirineo en busca de las especies más “tempraneras”; teniendo siempre en cuenta la precipitación caída en los últimos veintiún días.
Port del Compte


Los Rasos de Peguera en Berga; Castellar de N’Hug, La Pobla de Lillet, Gòsul, Saldes, el Port del Compte, San Llorenç de Morunys, o la Sierra de Busa, son algunos de los lugares más concurridos. 
Durante la temporada de setas (sobretodo al principio), son clásicas las caravanas de fin de semana con dirección a los montes. Desde mucho antes de amanecer, las principales vías que salen de la capital y de las ciudades; las carreteras comarcales y locales; caminos vecinales y senderos de los bosques, se ven inundados de “domingueros” o “pixa pins”, (mea pinos) como nos denominan los habitantes de los pueblos de montaña y los “payeses”, a todos los que subimos en tropel desde la costa, el pre-litoral y la depresión central.

Los habitantes de las zonas rurales aman y respetan los bosques, y por desgracia, la mayoría de las personas que vamos a buscar setas, lo ponemos todo “patas arriba” y removemos el suelo rompiendo el micelio (especie de tela de araña, que crece debajo de la hojarasca -en putrefacción- y que es como si fuera las raíces de las setas). De esta manera se corre el riesgo de que cada vez salgan menos ejemplares. También es triste testimonio de nuestro paso por el bosque, el rastro de latas de cerveza o cola, papel de aluminio etc., que se dejan semana tras semana y que tardarán muchas décadas en desaparecer. 

Hay unas “normas establecidas” por todas aquellas personas amantes de los bosques, y que en los últimos años, los medios de comunicación se están encargando de recordar, y de esta manera “educarnos” a todos los buscadores de setas: No utilizar nunca rastrillos, ni levantar el terreno con bastones (por lo del micelio); no arrancar las setas, aunque sean “dolentes” (malas); y cuando se coge un ejemplar, hay que tapar cuidadosamente el hueco dejado. Arrancar la seta o cortarla con un cuchillo, es algo en lo que todavía no se ponen de acuerdo los “entendidos”.

Con todas estas “nociones” aprendidas cogemos las cestas y una bota de buen vino, para calentar el cuerpo en las frías mañanas de otoño mientras disfrutamos del bocadillo en compañía, pues las mañanas de los fines de semana huelen a bosque, a amistad y compañerismo… Incluso, se suele decir entre los “boletaires” (buscadores de setas), y lo puedo confirmar, que aunque no se tenga suerte y vuelvas a casa con la cesta vacía, nada más que por el “esmorçar” (desayuno) en el bosque, ya ha valido la pena el madrugón. 
Como solía pasar con las alcaparras en Benínar, para tener éxito en la búsqueda, la principal “regla” es llegar el primero. Para ello, es imprescindible aplicar el dicho: “a quien madruga Dios le ayuda” y según hacia donde te dirijas ese día, habrá que levantarse un par de horas antes de que amanezca.

Montaña de Montserrat desde Busa

Cuando apenas clareando el día, con las luces encendidas tomas cualquiera de los embarrados caminos de los bosques, y en cada rincón ves brillar las matrículas de los coches que te han “cogido la delantera”, el malhumor te hace soltar aquello de: ”hoy llevamos el cenizo metío”. Si vas en un vehículo adecuado, la mejor decisión es seguir avanzando, muchas veces por caminos impracticables, para dejar atrás a la “legión” de competidores.

Cuando se encuentra un trozo libre de coches y con buena “pinta”, y si la mayoría de compañeros están de acuerdo, empieza la búsqueda que puede durar cinco o seis horas… dependiendo de la suerte en ese día, y de que hayas encontrado un buen “roal”.

La fiebre por la búsqueda baja en Noviembre, cuando las setas empiezan a salir como quien dice en la puerta de casa, (a pesar de que los incendios de los últimos años destruyeron muchos de los hermosos bosques que había aquí en el centro de Cataluña), y cuando las heladas en la montaña terminan con los últimos ejemplares más resistentes al frío. 

Rovelló


 Por esta zona, las setas preferidas y consideradas “trofeos” por quien las encuentra son: Los “Ceps”, “L’ou de Reig”, les “Llanegues” y los “Rovellons”, que se pueden encontrar en muchos lugares, pero con bastantes días de diferencia, dependiendo de la altitud y temperatura de cada zona.

De una comarca a otra, crecen setas de diferentes tipos. Se suele dar el caso, de que especies muy apreciadas en un lugar, en otras zonas no se les dé el menor valor culinario. 

A nivel de Cataluña, las “estrellas” dentro del mundo de las setas son: 

Reig “ou de reig” (amanita caesarea)

Cep “cep” (boletus edulis) 
Cep d’Estiu “cep de verano” (boletus aestivalis) 
Cep Rogenc “cep rojizo” (boletus rogenc)

Rovelló “rovullón o níscalo” (lactarius sanguifluus) 
Rovelló “rovullón o níscalo” (lactarius deterrimus) 
Pinatell “pinatell, rovellón” (lactarius deliciosus) 
Pinatell d’Avét “pinatell, rovellón de aveto” (lactarius salmonicolor) 

Llanega negra “llanega negra”, “babosa” (hygrophorus laitabundus)
Llanega blanca “llanega blanca” (hygrophorus gliocyclus) 

También existen una gran variedad de especies más o menos apreciadas, y que han formado y forman parte de la gastronomía más tradicional de aquí, especialmente durante los otoños lluviosos.
Fredolics

Rossinyol “ruiseñor” (cantharellus cibarius) 
Fredolic “fredulic”, “friolero” (tricholoma terreum) 
Camagroc “pata amarilla” (cantharelus lutescens)

Carlet “carlet rosado”, “escarlet” (higrophorus russula) 
Carlet Roig “carlet rojo” (higrophorus nemoreus) 
Carlet Blanc “carlet blanco” (higrophorus penarius)

Molleric “pinatell” (suillus granulatus) 
Pebràs “pabras” (russula delica) 
Apagallum “apagaluces” (macralepiota procera) 
Llengua de bou “lengua de buey” (hyduum repandum) 
Cama de perdiu “pata de perdíz” (chroogomphus rutilus) 
Peu de Rata Daurat “pie de rata dorado” (rumania aurea) 

Hay una gran variedad de especies con nombres muy curiosos y familiares, que son poco apreciadas, y algunas muy indigestas, dependiendo como se cocinen. 

Orella de Gat “oreja de gato” (helvella crispa) 
Orella d’Ase “oreja de asno” (otidea onotica) 
Pet de Llop “pedo de lobo” (licoperdon perlatum) 

Algunas de las setas más populares se consumen “a la brasa”, con un buen chorreón de aceite de oliva, ajo y perejil picado por encima. Son muy típicos los rovellones a la plancha acompañados de “butifarra de pagés”.

Tampoco hay que olvidar los ricos guisos y estofados, sobretodo de “vedella” (ternera) con llanegas, rovellones, o la típica “barrecha”, (mezcla de varias especies de setas). 

Antiguamente, como no había congeladores, la manera de guardar las setas para que durasen todo el año, era “confitándolas” (poniéndolas en conserva), o secándolas al sol. Los métodos que se utilizaban y se siguen utilizando hoy en día son: después de “bullirlas” (darle un hervor) se guardan en recipientes con agua y abundante sal, o directamente al baño maría. 

Setas en conserva


Salvo las llanegas y los ceps, hay pocas especies que toleren bien lo de ser congeladas “en crudo”. En cambio, hay bastantes especies que para congelarlas, es aconsejable hervirlas o “sofregir-les” (marearlas) antes. 

La primera regla de todo buscador de setas es no coger aquellas especies que desconozcas, y si eres “novato” no comer ninguna sin que antes les dé el “visto bueno”, alguien entendido en la materia. 

Mucha precaución!!, puede que alguno de los ejemplares descritos o fotografiados por mí, resulten venenosos. 

Cada año hay cientos de personas intoxicadas, llegando incluso a la muerte, por ingerir setas. 

Juan Gutiérrez, octubre 2012.

7 comentarios:

  1. Se ve que eres experto, yo tambien busque en varias ocasiones y temporadas allá por Tordera.
    Enhora buena, que disfruteis de esta campaña
    Saludos

    ResponderEliminar
  2. Aquí aun no ha llovido lo suficiente, ni tenemos la temperatura apropiada. Pronto saldré al campo a disfrutar y no solo de llenar la cesta igual que tu. Algo parecido como salíamos a buscar caracoles en Benínar.
    ¿LA Alpujarra no tiene cetas o los alpujarreños no las vimos?.

    ResponderEliminar
  3. Muchas veces he pensado si en las alamedas que había en el río nacerían setas. Parece ser que esta delicia gastronómica no era muy apreciada ya que nunca oí de nadie que saliera a coger setas ni de su uso en la gastronomía local.
    Descubrí esta afición de la mano de mi suegro. Níscalos, setas de cardo, de chopo y champiñones silvestres (entre otras) son habituales en el norte de Granada. Lo malo es que es más frecuente que el número de “seteros” sobrepase al de setas.
    Revuelto de setas o setas con… de tapa junto con una Alhambra 1925 es una delicia que suelo degustar cada año con las primeras lluvias del otoño.
    Juan, las cestas llenas de setas acompañadas de esas sonrisas de oreja a oreja dicen más que mil palabras.
    Que disfrutéis y os aproveche.
    Saludos Benínar.

    ResponderEliminar
  4. Pero lo mejor, la sonrisa de oreja a oreja de los recolectores de setas con sus cestos llenos de ellas.

    ResponderEliminar
  5. El documental te ha quedado, como se suele decir, redondo; parecido a las setas que muestras en las fotografías.
    ¡Espero que no las hayáis comprado en una casa de "pagès" de las que hay por los alrededores!
    Este año, dice la prensa que no había buena cosecha, será porque no os han visto a vosotros.
    prefiero las llanegas (hygrophorus laitabundus); son mis preferidas. Hace más de 50 años que no las pruebo, aunque recuerdo el sabor que tenían: a la brasa o estofadas con carne ¡deliciosas!

    ResponderEliminar
  6. PACO RAMÓN: se nota que estuviste unos años en Cataluña.

    PACO MALDONADO: en algún reportaje de Pedro Medina o de Pepe Agus fotografiaron en los pinos que hay por los cerros de Benínar un "Molleric" especie que tambien sale por aquí.
    Según me contó Pepe el de Julia q.p.d. en Sierra Gador salían rovellones (níscalos).
    Y he visto en Canal Sur, que desde la sierra norte de Sevilla y Huelva salen diariamente hacia Italia camiones frigoríficos cargados de setas. (hay especies como los boletus (ceps) que con la pasta y los risotos están deliciosos)

    PACO INDALOXES: Acabo de llamar a un "joven" de 89 años, beninero que vive aquí en S. Juan, y que tras la muerte de mi hermana Constanza, para animarme me llevaba con su sobrino Juan todos los sábados a buscar setas por la zona de Berga,(que él conoce muy bien pues está en Cataluña desde joven) y me ha dicho que en Benínar salían setas en los álamos y que él las comía, pero no lo sabía mucha gente.

    RAFA: seguro que en Granada si que las habrás comido desde pequeño.

    JOSÉ AÑEZ: Hay gente que suelen comprar setas en puestecillos al lado de las carreteras, para "salvar la honrilla" y no llegar a casa con las cesta vacía; eso sí, pagándolas a precio de oro. Esta semana, los rovellones autóctonos están entre los veinte y treinta euros dependiendo del establecimiento. Los que vienen de Rumanía, de Aragón y otras regiones españolas suelen estar más baratos.

    Tenía que haber esperado para conseguir fotos mejores, pues hice unas pocas el año pasado y dos días de este, pero para una "muestra" y que se hicieran una idea los paisanos que nunca han buscado setas...
    Anuncian precipitaciones abundantes en los próximos días. Lo bueno está por llegar!!!

    Ya guardaré unas pocas llanegas congeladas para comerlas despues del arróz en Febrero. Este año os toca a vosotros (hay lista de espera... por si a alguien le interesa)

    Saludos a todos, y espero que hayais pasado un rato entretenido con el "documental".

    ResponderEliminar
  7. Como esta para ir este fin de semana a rasos

    ResponderEliminar

Por favor, ídentifícate en los comentarios.