
Popularmente hablando se llama guano cualquier tipo de abono. Pero no es cierto, no nos confundamos, no es cualquier clase de abono, sino que realmente el guano es un fertilizante natural consistente en excrementos fosilizados de ciertas aves marinas de América. Antes de la invención de los actuales abonos sintéticos (sulfato amónico, nitratos, fosfatos y superfosfatos, etcétera) era el abono más apreciado. Hoy día prácticamente no se utiliza en la agricultura europea.
El guano está compuesto de amoníaco (huele mucho a esta substancia), ácido úrico, fosfórico, oxálico, y ácidos carbónicos, sales e impurezas de la tierra, es decir, los componentes habituales de los excrementos de las aves (las gallinazas). Pero a diferencia de las gallinazas frescas, o del estiércol, es un producto que lleva miles y millones de años madurando en un ambiente seco y por ello está bastante concentrado en substancias nitrogenadas y fosforadas. En cuanto a potasio, el otro macronutriente de los vegetales, es deficitario.
Imaginemos que en el Plioceno, una era geológica de hace más de 5 millones de años, echamos (con la imaginación, por supuesto) un corral de gallinas. Y durante estos 5 millones de años, las gallinas no paran de comer, reproducirse y producir gallinazas. Supongamos, igualmente con la imaginación, que en estos 5 millones de años no hemos tenido tiempo de limpiar el corral, ni siquiera de pasadilla para quitar lo que "la suegra ve"... Después de 5 millones de años sin limpiar, para mirar el suelo del corral no hay que bajar la cabeza, sino subirla bien en alto, hasta que duela el cuello, porque de tanto excremento se habrá formado una torre tan alta como la Giralda de Sevilla, por lo menos. Una torre de excrementos resecos, concentrados y oliendo a amoniaco... Pues bien, eso es el guano, que se recolecta en ciertas islas e islotes del pacífico cercanos principalmente a Perú que durante los últimos 5 años han acogido a millones y millones de aves marinas que no han parado de comer pescado, reproducirse y producir gallinazas...
El guano, aunque sea de origen orgánico, se extrae como si de un mineral se tratara. Se han explotado montañas enteras de guano. Y no valen imitaciones. No es guano el abono artificial. No son guano la gallinaza ni el estiércol del año pasado. Y seguramente no es guano lo que hay en el saco de la foto... Dice: Made In China. ¡Vaya usted a saber qué es!
¿En Benínar se usó guano auténtico? Sospecho que sí, ya que ha quedado como sinónimo de abono en general ¿Cuándo se empezaron a usar el superfosfato, los complejos NPK como el 15-15-15, etcétera y se abandonó el guano? ¿Razones de precio? ¿De eficacia? ¿De disponibilidad?
. IMPORTANCIA DE LOS ABONOS ORGÁNICOS.
ResponderEliminarLa necesidad de disminuir la dependencia de productos químicos artificiales en los distintos cultivos, está obligando a la búsqueda de alternativas fiables y sostenibles. En la agricultura ecológica, se le da gran importancia a este tipo de abonos, y cada vez más, se están utilizando en cultivos intensivos.
No podemos olvidarnos la importancia que tiene mejorar diversas características físicas, químicas y biológicas del suelo, y en este sentido, este tipo de abonos juega un papel fundamental.
Con estos abonos, aumentamos la capacidad que posee el suelo de absorber los distintos elementos nutritivos, los cuales aportaremos posteriormente con los abonos minerales o inorgánicos.
Actualmente, se están buscando nuevos productos en la agricultura, que sean totalmente naturales.
Existen incluso empresas que están buscando en distintos ecosistemas naturales de todas las partes del mundo, sobre todo tropicales, distintas plantas, extractos de algas, etc., que desarrollan en las diferentes plantas, distintos sistemas que les permiten crecer y protegerse de enfermedades y plagas.
De esta forma, en distintas fábricas y en entornos totalmente naturales, se reproducen aquellas plantas que se ven más interesantes mediante técnicas de biotecnología.
En estos centros se producen distintas sustancias vegetales, para producir abonos orgánicos y sustancias naturales, que se están aplicando en la nueva agricultura.
Para ello y en diversos laboratorios, se extraen aquellas sustancias más interesantes, para fortalecer las diferentes plantas que se cultivan bajo invernadero, pero también se pueden emplear en plantas ornamentales, frutales, etc.
vslfrmPROPIEDADES DE LOS ABONOS ORGÁNICOS.
ResponderEliminarLos abonos orgánicos tienen unas propiedades, que ejercen unos determinados efectos sobre el suelo, que hacen aumentar la fertilidad de este. Básicamente, actúan en el suelo sobre tres tipos de propiedades:
- Propiedades físicas.
• El abono orgánico por su color oscuro, absorbe más las radiaciones solares, con lo que el suelo adquiere más temperatura y se pueden absorber con mayor facilidad los nutrientes.
• El abono orgánico mejora la estructura y textura del suelo, haciendo más ligeros a los suelos arcillosos y más compactos a los arenosos.
• Mejoran la permeabilidad del suelo, ya que influyen en el drenaje y aireación de éste.
• Disminuyen la erosión del suelo, tanto de agua como de viento.
• Aumentan la retención de agua en el suelo, por lo que se absorbe más el agua cuando llueve o se riega, y retienen durante mucho tiempo, el agua en el suelo durante el verano.
Propiedades químicas.
ResponderEliminar• Los abonos orgánicos aumentan el poder tampón del suelo, y en consecuencia reducen las oscilaciones de pH de éste.
• Aumentan también la capacidad de intercambio catiónico del suelo, con lo que aumentamos la fertilidad.
- Propiedades biológicas.
• Los abonos orgánicos favorecen la aireación y oxigenación del suelo, por lo que hay mayor actividad radicular y mayor actividad de los microorganismos aerobios.
• Los abonos orgánicos constituyen una fuente de energía para los microorganismos, por lo que se multiplican rápidamente.
3. TIPOS DE ABONOS ORGÁNICOS.
El extracto de algas, es normalmente producto compuesto carbohidratos promotores del crecimiento vegetal, aminoácidos y extractos de algas cien por cien solubles.
Este producto es un bioactivador, que actúa favoreciendo la recuperación de los cultivos frente a situaciones de estrés, incrementando el crecimiento vegetativo, floración, fecundación, cuajado y rendimiento de los frutos.
Otro tipo de abono orgánico, se basa en ser un excelente bioestimulante y enraizante vegetal, debido a su contenido y aporte de auxinas de origen natural, vitaminas, citoquininas, microelementos y otras sustancias, que favorecen el desarrollo y crecimiento de toda la planta.
Este segundo producto es de muy fácil asimilación por las plantas a través de hojas o raíces, aplicando tanto foliar como radicularmente, debido al contenido en distintos agentes de extremada asimilación por todos los órganos de la planta.
Otro abono orgánico, contiene un elevado contenido en aminoácidos libres, lo cual significa que actúa como activador del desarrollo vegetativo, mejorando el calibre y coloración de los frutos, etc.
El aporte de aminoácidos libres facilita el que la planta ahorre energía en sintetizarlos, a la vez que facilita la producción de proteínas, enzimas, hormonas, etc., al ser éstos compuestos tan importantes para todos los procesos vitales de los vegetales.
Por último podemos destacar los típicos abonos orgánicos, que poseen gran cantidad de materia orgánica, por lo que favorecen la fertilidad del suelo, incrementan la actividad microbiana de este, y facilitan el transporte de nutrientes a la planta a través de las raíces.
Las sustancias húmicas incrementan el contenido y distribución de los azúcares en los vegetales, por lo que elevan la calidad de los frutos y flores, incrementando la resistencia al marchitamiento.
El aporte de distintos elementos nutritivos es fundamental para el desarrollo fisiológico normal de la planta, ya que alguna carencia en los mismos, pueden provocar deficiencias en la planta que se pueden manifestar de diferentes formas.
4. ENMIENDAS HÚMICAS.
Las enmiendas húmicas favorecen el enraizamiento, ya que desarrollan y mantienen un sistema radicular joven y vigoroso, durante todo el ciclo de cultivo.
El desarrollo radicular, de la planta con aporte de enmiendas húmicas es enorme, y esto hace que el desarrollo de la misma sea mucho más rápido, debido a que absorbe mayor cantidad de elementos nutritivos, y esto se traduce en mayor producción.
Este abono orgánico al desarrollar más las raíces, equilibra también mejor la nutrición de las plantas, mejora el comportamiento de éstas frente a condiciones salinas y ayuda a la eliminación de diversas toxicidades.
Las raíces son el pilar básico de una planta, ya que no podemos olvidar que le sirven de sujeción al suelo. Las raíces de las plantas hortícolas son fasciculadas, no distinguiéndose un pivote principal. Están constituidas por una serie de troncos principales que profundizan oblicuamente en el suelo y de los cuales nacen las raíces secundarias.
La escasez de materia orgánica, y por tanto de ácidos húmicos y fúlvicos de los suelos, hace necesario el aporte de los mismos al suelo.
Dada las dificultades técnicas, logísticas y económicas de los aportes masivos de estiércol como fuente de materia orgánica, los preparados líquidos a base de ácidos húmicos y fúlvicos, se hacen imprescindibles para mejorar la fertilidad y productividad de los suelos.
La leonardita es un lignito blando en forma ácida, de color pardo y de origen vegetal. Es la materia prima de las sustancias húmicas, ya que posee un gran contenido de extracto húmico total.
AMINOÁCIDOS.
ResponderEliminarOtro elemento fundamental en los abonos orgánicos, son los aminoácidos.
Desde 1804 hasta nuestros días, los fisiólogos vegetales han demostrado que, además del carbono, hidrógeno y oxígeno, son trece los elementos químicos que se consideran esenciales, para la vida de las plantas.
De éstos, el más importante con diferencia es el nitrógeno. La fertilización tradicional no siempre consigue su objetivo. Situaciones de estrés hídrico, térmico o fitotóxico, pueden impedir que las plantas absorban el nitrógeno disponible y lo utilicen para sus procesos biosintéticos.
Estos problemas pueden solucionarse, valiéndose de los conocimientos más modernos de fisiología vegetal utilizando elementos básicos de la biosíntesis........, es decir los aminoácidos.
Los aminoácidos constituyen la base fundamental de cualquier molécula biológica, y son compuestos orgánicos. No puede realizarse proceso biológico alguno, sin que en alguna fase del mismo intervengan los aminoácidos.
Estos aminoácidos se fabrican en empresas especializadas, mediante un recipiente mezclador en el cual se colocarán levaduras, y otros productos. Posteriormente y mediante diversas hidrólisis y centrifugación, se dispondrá del abono orgánico.
Las proteínas son sustancias orgánicas nitrogenadas de elevado peso molecular, y todas están constituídas por series definidas de aminoácidos.
Los aminoácidos son por tanto las unidades básicas de las proteínas. La mayoría de las proteínas contienen veinte aminoácidos.
Las plantas sintetizan los aminoácidos a través de reacciones enzimáticas, por medio de procesos de aminación y transaminación, los cuales conllevan un gran gasto energético por parte de la planta.
Partiendo del ciclo del nitrógeno, se plantea la posibilidad de poder suministrar aminoácidos a la planta, para que ella se ahorre el trabajo de sintetizarlos, y de esta forma poder obtener una mejor y más rápida respuesta en la planta.
De esta forma los aminoácidos son rápidamente utilizados por las plantas, y el transporte de los mismos tiene lugar nada más aplicarse, dirigiéndose a todas las partes, sobre todo a los órganos en crecimiento.
Los aminoácidos, además de una función nutricional, pueden actuar como reguladores del transporte de microelementos, ya que pueden formar complejos con metales en forma de quelatos.
Pero la calidad de un producto, a base de aminoácidos, tiene relación directa con el procedimiento empleado para la obtención de dichos aminoácidos.
Todos los abonos orgánicos, se pueden utilizar en cualquier especie vegetal y su aplicación es normalmente mediante el riego, colocándose una serie de depósitos auxiliares, a través de los cuales se inyectan en la red de riego, y en las cantidades que veamos oportuno
¿Qué es el humus?
ResponderEliminarEl humus es una sustancia que se produce por la descomposición en el suelo de restos orgánicos.
Ejemplo: cuando cae una hoja al suelo es atacada por hongos y bacterias y una parte de esa hoja se convierte en humus. Ocurre igual con el estiércol, compost, turba y cualquier material orgánico: son atacados por los microorganismos y se forma humus.
Con los años, el humus también se descomponerá y transformará en minerales, pero lentamente; desaparecerá como humus después de más de 3 años.
¿Qué beneficios produce el humus?
El humus es una sustancia muy especial y beneficiosa para el suelo y para la planta:
Agrega las partículas y esponja el suelo, lo airea; por tanto, mejora su estructura.
Retiene agua y nutrientes minerales y así no se lavan y pierden en profundidad.
Aporta nutrientes minerales lentamente para las plantas a medida que se descompone (Nitrógeno, Fósforo, Potasio, Magnesio, etc.).
El humus produce activadores del crecimiento que las plantas pueden absorber y favorece la nutrición y resistencia: vitaminas, reguladores de crecimiento (auxinas, giberelinas, citoquinicas) y sustancias con propiedades de antibióticos.
Las raíces se encuentran mejor en un suelo rico en humus que en uno pobre en esta sustancia.
¿Cómo saber la cantidad de humus que tiene el suelo?
El método preciso es llevando una muestra de suelo a analizar a un laboratorio. Se determina el valor exacto. Por ejemplo: "Este suelo tiene un 1,7% de humus" (materia orgánica). Quiere decir que por cada 100 kilos de tierra, hay 1,7 kilos de humus.
La mayoría de los suelos cultivados tienen entre un 1 y un 3% de humus. La arena de la playa es muy pobre en humus, no llega al 1%, pero el suelo de un bosque puede superar el 5% de humus.
Si sale un valor muy bajo es más que recomendable hacer un plan de mejora para aumentarlo, mediante, por ejemplo, fuertes estercoladuras durante varios años seguidos.
¿Cómo aumentar el humus del suelo con abono orgánico?
Aportando al suelo abonos orgánicos: estiércol, compost, turba, guano, humus de lombriz, etc.
Exige tiempo; de la noche a la mañana no se puede pasar de un 1% de humus al 2%; se consigue a lo largo de una serie de años.
Más o menos el 10% del estiércol que se echa se convierte en humus. Es decir, que si echas 10 kilos de estiércol al suelo, obtienes 1 kilo de humus.
Hay plantas que gustan de un suelo rico en materia orgánica; otras normal y otras que, incluso, prefieren un suelo pobre en humus, por ejemplo, la vegetación del desierto.
¿Cuándo aportar el abono orgánico?
En invierno es el mejor momento para aportar abonos orgánicos al suelo, los cuales producirán humus y nutrientes para las plantas (Nitrógeno, Potasio, Azufre, etc.).
¿Se puede abonar sólo con abono orgánico?
Sí, podrías abonar sólo con abonos orgánicos, es lo que se suele hacer en las huertas tradicionales, pero...
Sale más caro que los fertilizantes químicos.
En determinados momentos hacen falta grandes cantidades de nitrógeno y de los demás elementos y los abonos orgánicos no pueden suministrarlo ya que ellos van descomponiéndose lentamente, según el clima y el tipo de suelo.
Si hay carencias de micronutrientes, por ejemplo, de hierro, la manera más fácil de corregirla es con fertilizantes minerales, por ejemplo, con quelatos de hierro.
Los abonos químicos o minerales lo único que aportan son nutrientes puro y duro, ni humus ni mejora del suelo en otros aspectos como hacen los abonos orgánicos. Eso sí, enriquecen de minerales el suelo y las plantas disponen de alimento en cantidad, pero nada más.
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Todo un tratado sobre los abonos. Se nota que te hemos tocado en tu fibra sensible: está claro que la agricultura es lo tuyo.
ResponderEliminarPero hay una información de más valor que no has puesto y es si llegaste a conocer o a aplicar el guano auténtico, o eso fue más bien en tiempos más antiguos.
Saludos.
ABONOS NATURALES, LO MEJOR PARA LA TIERRA
ResponderEliminarPlantearse un cultivo biológico, tanto en el huerto como en el jardín, se está convirtiendo en una necesidad imperiosa. Los abonos químicos ofrecen un resultado muy rápido y sorprendente, pero tienen una clara desventaja, y es que acaban creando una tierra improductiva, además de ser contaminantes. Los cultivos siguen un proceso cíclico de influencias, y constituye un ecosistema cerrado, que se ha roto con la introducción de fertilizantes artificiales.
Aunque los fertilizantes artificiales son los más utilizados por su bajo coste y comodidad, aportan muchos menos beneficios al suelo que los naturales, debido a su alto componente químico. El más común de los abonos naturales es el compost, derivado de excrementos de animales o residuos putrefactos. Para el huerto, es esencial añadir una buena cantidad de nutrientes al terreno, sobre todo, minerales.
ResponderEliminarTradicionalmente los campesinos utilizaban el estiércol en vez de los desechos vegetales. Actualmente lo más común es mezclarlos: por cada tres fracciones de vegetal, una de animal. Otra opción es valerse de plantas, que esparcidas por el suelo se pudren y son una excelente fuente de alimento para la superficie
Rafa, si entiendes por guano autentico: Nitrato de Chile, Superfosfato, Almoniaco, Potaza, Sulfato de Hierro, Cobre, etc. Si.
ResponderEliminarLlamamos fertilizante o abono a cualquier sustancia orgánica o inorgánica, natural o sintética que aporte a las plantas uno o varios de los elementos nutritivos indispensables para su desarrollo vegetativo normal.
ResponderEliminarLas plantas extraen su alimento del agua del suelo y el oxígeno, hidrógeno y carbono del aire, pero para completar su alimentación necesitan utilizar ciertas sustancias químicas simples del suelo, son los llamados nutrientes vegetales.
Los fertilizantes y abonos se encargan de entregar y devolver a la tierra los nutrientes necesarios para el adecuado crecimiento de plantas, árboles, prados y arbustos.
Todos los suelos poseen una cierta cantidad de nutrientes vegetales provenientes de la parte mineral del suelo, (arena, arcilla, etc.) y del humus generado por el reciclaje de materias vegetales y animales caídas sobre la superficie (hojas, flores, raíces muertas, etc.).
Cuando se cultivan las plantas, el equilibrio se altera, porque el proceso de reciclaje natural de los elementos esenciales del suelo es más lento de lo que demora la planta en utilizarlos.
Esta pérdida afecta a 3 elementos:
Nitrógeno (N): promueve el crecimiento de la planta. Cuando falta nitrógeno en las plantas las hojas se ponen amarillas y dejan de crecer.
Fósforo (P): favorece la maduración de flores y frutos, fomenta su perfume y dulzor, les da la fuerza necesaria para mantenerse rígidas y poder sostener todas sus partes. También promueve el buen desarrollo de las raíces y fortalece el ciclo de cada planta. La falta de fósforo se reconoce porque las hojas se oscurecen más de lo normal. La planta deja de florecer o florece muy poco y las raíces dejan de crecer.
Potasio (K): es el responsable de la multiplicación celular y de la formación de tejidos más resistentes a la sequía y las heladas. Sin potasio las hojas muestran severos cambios de color que pueden ser en tonalidades amarillentas o verde muy pálido con manchas cafés.
Estos elementos son los principales nutrientes vegetales y las plantas para su buen desarrollo, los requieren en grandes cantidades, por esto es necesario volver a incorporarlos al suelo con regularidad. También extraen del suelo los llamados " microelementos" , como zinc, hierro, magnesio, calcio, etc., que los requieren en cantidades mínimas, pero también importantes para su nutrición. También muestran cambios cuando les falta algunos de estos componentes.
Una parte de los aportes de nutrientes proviene de los abonos orgánicos, como compost y estiércol, pero su principal fuente de suministro son los fertilizantes, que aportan cantidades considerables de 1 o más de esos nutrientes, sin aumentar de manera importante la cantidad de humus contenido en el suelo. La proporción de los nutrientes dependerá del origen y fabricación del fertilizante.
Además de reponer los nutrientes eliminados del jardín al ser utilizados por las plantas, lavados del suelo por el agua de lluvias y riego, podas, barrido de hojas, etc., también aceleran y mejoran algunas funciones de las plantas, tales como la floración, tamaño de las frutas, etc. prolongan su vida, y se protege de plagas y enfermedades.
Cada uno de los diferentes tipos orgánicos e inorgánicos, puros y compuestos, líquidos y sólidos, cumple distintas funciones. No hay mejores o peores, la adecuada elección dependerá de:
La fertilidad del suelo y su nivel de salinidad.
Cantidad de agua disponible.
Condiciones climatológicas.
Tamaño de la especie vegetal.
Tipo de planta: si es cultivada por sus hojas o sus flores su época de floración su estructura y resistencia su edad. Las necesidades de cada variedad son tan diferentes como las cantidades de nutrientes que tienen los distintos fertilizantes.
Por regla general, debemos abonar nuestras plantas regularmente, pero no más seguido de lo que se recomienda para cada producto. Cuando se planta una nueva planta se tiene que aplicar fertilizante en el hoyo. La primavera es el mejor momento para abonar las flores. También se debe usar fertilizante en el momento de sembrar. Los árboles no suelen abonarse mucho, pero en suelos pobres en nutrientes si se deben abonar. Una vez al año, o al menos cada dos años, se puede aportar alrededor del árbol, unos 2 kg. de abono orgánico y mezclarlo un poco con la tierra, o extender unos 80 gramos de abono mineral de lenta liberación. El abonado orgánico se realiza en invierno y si es abono mineral, en primavera u otoño.
Seguir las instrucciones de la etiqueta tanto las que se refieren a cantidades como las que tratan sobre el modo de uso.
CLASIFICACIÓN
INORGÁNICO: todo producto desprovisto de materia orgánica que contenga, uno o más elementos nutritivos de los reconocidos como esenciales al crecimiento y desarrollo vegetal. Pueden ser minerales naturales extraídos de la tierra, o bien elaborados por el hombre (fertilizantes " sintéticos" o " artificiales" ). Ambos se descomponen antes de ser absorbidos. Son más utilizados y conocidos que los orgánicos, se disuelven con facilidad, y actúan rápidamente sobre el suelo.
Los Minerales se clasifican en:
Mineral simple: producto con un contenido declarable en uno solo de los macroelementos siguientes: nitrógeno, fósforo o potasio.
Abonos nigrogenados: nitrato de calcio, nitrato de magnesio, nitrato amónico, sulfato amónico, nitrato de Chile, urea, nitrato potásico, nitrato sódico, otros.
Abonos fosfatados: superfosfato normal o superfosfato simple, superfosfato concentrado, superfosfato triple, fosfato amónico, otros.
Abonos potásicos: sulfato potásico, cloruro potásico, otros.
Mineral complejo: producto con un contenido declarable de más de uno de los macroelementos siguientes: nitrógeno, fósforo o potasio. Pueden ser binarios o ternarios, según contengan dos o los tres macronutrientes.
Abonos NPK, Abonos NP, Abonos NK, Abonos PK
Cuando he hablado de guano auténtico, me refiero a eso, el auténtico, los excrementos fosilizados de las aves de las islas del Perú. Eso es como decir vino de la Rioja. Hay muchos vinos, pero el vino de la Rioja auténtico es el que se hace en la Rioja. Los otros también son muy buenos, pero no son de la Rioja, nada más.
ResponderEliminarLo que pasa es que popularmente la gente llama guano a cualquier tipo de abono y no es cierto. El guano es el guano y los otros abonos son los otros.
Por ejemplo, el nitrato de Chile es químicamente el nitrato potásico. Si se obtiene de una mina de extracción natural y de Chile se llama nitrato de Chile. Si es sintético, se llama nitrato potásico. Desde el punto de vista agrícola no tiene por qué haber diferencia, entre el natural y el sintético porque son iguales.
¿Qué abono es el mejor? Mi opinión como químico que soy, no como agricultor: todos son buenos. Tan solo hay que combinarlos sabiamente. El estiércol y los residuos vegetales aportan estructura al suelo y lo sueltan, pero a veces se quedan cortos en cuanto a aportaciones. ¿Los sintéticos?, sin abusar de ellos permiten regular con toda precisión el abonado, añadiendo exactamente aquello que la tierra necesita. El uso combinado de distintos abonos, estiércoles, compost, etcétera, es lo adecuado.
Una pequeña pregunta, si alguien está interesado en saber como se sintetizan los abonos, el proceso industrial y eso, puedo preparar artículos sobre ello. El abono ha sido siempre el centro de interés de todos los agricultores, benineros incluidos. Saben como usarlos, pero a lo mejor os puede interesar saber cómo se fabrican.
Saludos.