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lunes, 15 de diciembre de 2008

La matanza del marrano en Benínar

La matanza del marrano en otros tiempos representaba el medio de comer carne durante varios meses gracias a los embutidos y los adobos. También era uno de los actos sociales más importantes a los que se podía asistir en el año. Hoy día disponer de carne en cualquier época es algo muy sencillo, pero si se desea tener la satisfacción de comer lo que ha criado uno mismo, la matanza de un par de marranos puede ser acertado. Además, el acto social no ha perdido un ápice de su interés.

El video adjunto fue grabado el día 6 de diciembre de 2008 en Benínar y recoge el sacrificio de dos hermosos cerdos bajo supervisión de las autoridades sanitarias. Es la versión actualizada de la fotografía antigua que recogíamos en un artículo anterior y en la exposición fotográfica de las Fiestas. Los marranos, como se observa en el video, se han matado al estilo tradicional, con la colaboración de familiares y amigos. El video termina con los marranos abiertos y oreándose, para que al día siguiente se preparen los embutidos, los jamones y las paletillas. En la tarde del mismo día en que se sacrifican, se cuecen las morcillas, pero no se han podido recoger imágenes a causa de ocupaciones personales que desgraciadamente me lo han impedido. No obstante, buscaremos las imágenes que se han grabado con otra cámara.

Aviso: Se muestran imágenes explícitas del sacrificio que pueden ser desagradables a algunas personas.




Antonio, enhorabuena, las morcillas estaban buenísimas. Está claro que los marranos han sido muy bien criados y la matanza se ha realizado cumpliendo con todos los cánones.


4 comentarios:

  1. Cuando he visto el video, me han venido unos recuerdos significativos.
    Creo que la cebolla la cocerian el dia de antes, ya que tendria que escurriz.
    La botella de anis y de coñazcon los polvorones tampoco han faltado, sin embargo al ser tan rapido las tomas no he visto los higos que antiguamente eran un manjar que no podia faltar en el ritual.
    En Beninar habia muy buenos matarifes.
    Siempre la recogida y movida de la sangre lo hacia la mas esperta en estos rituales.
    La azadura Blanca y negra se picaba para la fritada cde cebolla.
    He comprobado que las Marino-veas no se han perdido (solomillos) estos se perdian para que las mujeres que hacian la matanza obsequialas con estas dos piezas especiales del marrano.
    Por la noche puchero, y despues morcilla.
    Habia una parte del marrano que nunca se aprovechaba que se le llamaba Pingo.
    Al dia siguiente cuando el frio habia encartonado el marrano el matarife se encargaba de desacer cada una de las piezas del mismo, se ponian en el sueloy se recortaban los jamones y brazuelos las panzas, las papas, los lomos, los espinazos, la cabeza y quijadas, se limpiaban las tripas y se utilizaban para la longaniza, el intestino grueso para la sobrasada los pellejos para la gutifarra, el rabo tambien se aprobechaba para el cocido o guisado. Las mantecas se dejaban colgadas junto con el marrano, despues se hacian los chicharrones
    Los sexos y los ojos eran un manjar, asi como la madre de la sangre. Pazzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzz

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  2. El cuento que Papanino le contó a su nieto.
    Después de La Guerra de Las Alpujarras, a la hora de medio día, apareció un gigante muy grande, tan grande que podía tocar las nubes. Tan grande que podía abrazar el Cerro de las Viñas con sus brazos. Los brazos los podía estirar de la misma forma como se estira la niebla. Con unos piés tan grandes, que podía poner un pie en Cintas y otro en la pared más grande del Cejol. Su cabeza estaba colocada tan alta, que unos benineros decían que era de una forma y otros de otra. En eso nunca se pusieron de acuerdo, en describir el cuerpo y la cabeza de aquel gigante pero sí en lo que dijo aquel gigante puesto que todos los años cuando aparecían los cejos en el Cejol, el pueblo olía a matanza.
    Aquel gigante, los reunió a todos los benineros en río y les dijo:
    “Os regalo un animal que será el encargado de reciclar todos los desperdicios de la casa y del campo en alimento”.
    “Cada año cuando aparezcan los cejos en El Cajol, será el momento en que sacrificaréis dicho animal y cada vecino llame a todos los de la calle para celebrarlo, además de sus parientes y amigos”.
    “Que todos los vecinos en ése día, se acuerden de todos aquellas personas necesitadas del pueblo y le mandarán a las casas de las viudas y necesitados lo suficiente, que cuando se terminen las matanzas en el pueblo, dichos necesitados tengan tanta comida en su despensa, como todos aquellos que no pudieron criar el cerdo”.
    “En esos días recorreré las calles del pueblo para ver si en todas, todas las casas del pueblo, tienen colgando de sus balcones y azoteas muestras suficientes que sí habéis compartido el alimento de dicho animal.
    “Tan solo os pongo una condición: En el pueblo nunca tendréis ni destinaréis un lugar llamado basurero”.

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  3. Con la industrialización y la economía global se están perdiendo muchas de las tradiciones de Nuestros pueblos.Seguro que estaba todo buenísimo.

    Tenemos que cuidar las Costumbres y Tradiciones de Nuestros Pueblos.

    saludos
    Fco. lópez

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  4. Pepe el de Angustias3 de abril de 2009, 11:41

    Jose Molina.
    Mi recuerdo de Beninar con la Matanza me lleva a pensar tantas cosas que los Benineros hacian para vivir en en el entorno que les dio la madre naturaleza y que ellos, nuestros padres abuelos,antepasados, consiguieron ser un pueblo autosuficientee en el 90 % de sus necesidades,en nuestro pueblo habia verdaderos maestros y maestras, de todas las profesiones, albañiles, Herreros,carpinteros,pastores,yeseros,carboneros,podadores, y lo mas importante agricultores,todos ellos, formaban un conjunto de actividad,la cual proporcionaba a todos el poder tener cubiertas sus necesidades basicas,es dificil encontrar dias del año en el cual no hubiese algo natural que comer en Beninar

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